En 2025, la experiencia de usuario en el ecosistema tecnológico se define por tres pilares: personalización, inteligencia artificial y continuidad entre dispositivos. Casos de Android TV y de la capa One UI de Samsung ilustran esa tendencia, mientras la dependencia de la nube recuerda la importancia de la fiabilidad de los servicios.

Android TV permite adaptar la pantalla de inicio para priorizar lo que cada usuario quiere ver. Se pueden reorganizar las filas de apps como Netflix, Prime Video o Disney; moverlas y ajustar qué canales aparecen desde el menú de ajustes. También existe la función Mi Lista para agrupar contenido y reorganizar las secciones de Apps y Juegos. En la sección de Pantalla de inicio y en Personalizar servicios se puede decidir qué servicios mostrar y en qué orden. En YouTube se pueden seleccionar secciones como Suscripciones, Tendencias y Recomendado, o YouTube Music, para que solo aparezcan las propuestas relevantes al usuario.

Samsung avanza con One UI 8 para reforzar un ecosistema donde el dispositivo móvil, la tablet, el reloj y otros dispositivos trabajan de forma más integrada. Aunque la experiencia es fluida y sólida, se señalan detalles que podrían refinarse, como el comportamiento de la batería al final de su autonomía, la posibilidad de bloquear rápidamente una app sin configurar perfiles complejos, y una ligera fricción cuando el teclado está activo con el gesto de volver. Más allá de esos ajustes, se apuesta por una experiencia cada vez más madura, centrada en la continuidad entre dispositivos y en la personalización basada en hábitos.

El futuro de One UI, según lo que se ha mostrado, pasa por una inteligencia artificial más reactiva y capaz de automatizar procesos, mayor continuidad entre dispositivos y una personalización que se adapte a cada usuario. Now Brief, la IA de Samsung, promete un espacio personal con información útil y un asistente que puede ayudar incluso con electrodomésticos conectados. Aunque no se especifica si veremos One UI 8.5 pronto, la dirección es clara: IA más integrada y experiencias multiplataforma cada vez más pulidas.

La caída masiva de X, antigua Twitter, en España y a nivel global refuerza una realidad inquietante: las plataformas dependen cada vez más de la infraestructura en la nube. Problemas reportados a las 12:00 y 12:25 afectaron web y app, dificultando la carga de tuits y contenido adjunto; Grok, la IA de la plataforma, también dejó de funcionar. La incidencia parece vinculada a una interrupción en la red global de Cloudflare, y ya hay indicios de recuperación para muchos usuarios.

En conjunto, estos ejemplos muestran que la industria tech empuja tres frentes: la personalización de la experiencia de usuario, el impulso de IA para hacerla más inteligente y la búsqueda de continuidad entre dispositivos, mientras la resiliencia de la nube se revela como un factor crítico para mantener esas experiencias sin interrupciones.

Te puede interesar también