El cierre de 2025 llega con una mezcla muy humana de tendencias en tecnología: ofertas de móviles de gama alta que llevan años en el mercado, avances en inteligencia artificial que intentan entender las leyes de la física, un panorama de hardware gráfico en movimiento y una conectividad entre Windows y Android que ya no es un lujo, sino una práctica diaria para profesionales y entusiastas. Todo ello ocurre en un contexto global donde la estabilidad y las alianzas influyen en cómo se invierte y se innova.

En el terreno de la movilidad, la tentación de apostar por un tope de gama de hace dos años puede superar a comprar un gama media del año en curso. Los móviles de alta gama suelen traer procesadores, cámaras y memoria más potentes, y, cuando se trata de actualizaciones, el control de software marca la diferencia. En Apple, por ejemplo, modelos como el iPhone 14 pueden seguir recibiendo actualizaciones hasta 2029, y el 13 hasta 2028; en la actualidad, la oferta más atractiva de Black Friday aparece con un iPhone 16e disponible en El Corte Inglés. En Android, la historia es distinta: las actualizaciones dependen del fabricante y suelen priorizar los modelos de gama alta, pero hay casos destacados. Samsung garantiza siete años de actualizaciones para sus topes de gama, Google ofrece siete años para los Pixel de 2025 (10, 10 Pro y 10 Pro XL), y la familia no para: Nothing, Motorola, Honor, Realme, Realme GT 8/8 Pro y Oppo también entran en la conversación con diversas propuestas.

En el ecosistema Android, la oferta de Black Friday tiende a centrarse en los modelos más recientes (2025) con descuentos moderados, mientras que las series anteriores se vuelven más difíciles de encontrar. Una excepción notable la marca Samsung, cuyas generaciones pasadas pueden verse en oferta y, aun así, prometen actualizaciones de varios años. En este escenario, la narrativa se completa con ideas claras: la planificación de lanzamientos suele concentrarse en septiembre-octubre y durante el Mobile World Congress, y si este Black Friday no te convence, es probable que 2026 traiga mejores precios para algunas familias. Además de los grandes nombres, aparecen opciones como Nothing Phone (3) y (3a), Motorola Edge 70 y sus predecesores, y la familia Honor Magic o Realme GT para quienes buscan buenas ofertas sin renunciar a rendimiento.

Una visión más amplia del mercado incluye a OnePlus, que acaba de presentar el OnePlus 15, dejando claro que el OnePlus 14 no existe por superstición en China; y a Sony con el Xperia 1 VII para 2025 frente a la línea Xperia 10 VII. En el cuaderno de ofertas también hay opciones para amantes de los juegos y del rendimiento extremo, como Asus ROG y ZTE Redmagic, que combinan potencia y pantallas de calidad para experiencias móviles gaming. Aunque Apple, Samsung y Xiaomi suelen acaparar la conversación, el mapa de la movilidad está lleno de nombres que merecen explorarse con ojo crítico y ofertas que pueden convertir modelos veteranos en elecciones muy concretas para este Black Friday.

En paralelo, el mundo de la inteligencia artificial da un paso más hacia la autonomía de descubrimiento. Un equipo chino presentó AI-Newton, un sistema basado en regresión simbólica que intenta no solo predecir, sino explicar. Partiendo de datos de 46 experimentos clásicos de física, AI-Newton logró deducir la ecuación de la velocidad y, posteriormente, derivar la segunda ley de Newton. A diferencia de los modelos de caja negra, este enfoque produce ecuaciones legibles y comprensibles. Aunque aún no está revisado por pares y se enfrenta a límites como la falta de sentido común y el contexto, la idea es clara: estas herramientas pueden acelerar el ciclo de generación de hipótesis y ayudar a los científicos a recorrer nuevos caminos.

En el frente del hardware, Nvidia ya mira la siguiente generación: la RTX 60 podría llegar a principios de 2027, tras la actual serie RTX 50 de 2025 basada en la arquitectura Blackwell. Todo depende de la viabilidad de las filtraciones y de posibles retrasos asociados a la supuesta RTX 50 SUPER. Este marco recuerda que el ciclo de renovación de GPUs suele ser sensible a la competencia y a la planificación tecnológica, y que la distancia entre generaciones importa para mantener un salto de rendimiento notable entre lanzamientos.

La conectividad entre dispositivos también da pasos grandes. Microsoft y Google están avanzando en hacer que Windows 11, actualizado de forma estable, permita retomar tareas del móvil Android en el PC, ampliando así la experiencia transdispositivo. La primera entrega ya se extiende a varias apps y marcas, con un foco inicial en Vivo, Samsung, Honor, Huawei y Oppo; la visión es que más modelos y apps se conecten en las próximas semanas, permitiendo, por ejemplo, retomar la lectura de un artículo en el PC o seguir trabajando en archivos de Word o Excel abiertos en el móvil, todo con una experiencia integrada y natural.

Y más allá de estas historias técnicas, la actualidad también nos recuerda la fragilidad de la estabilidad global y su impacto en el sector. Informes y negociaciones entre Ucrania y Rusia, con participación de Estados Unidos, Occidente y aliados, subrayan que la seguridad internacional sigue influyendo en inversiones, cadenas de suministro y cooperación tecnológica. Aunque las negociaciones apuntan a un marco de paz, el horizonte político continúa moldeando el mercado de hardware, software y servicios que todos queremos que funcionen sin sorpresas.

En conjunto, estas cinco historias —ofertas y durabilidad de móviles, IA que busca leyes, la promesa de la RTX 60, la conectividad avanzada entre Windows y Android y el entorno geopolítico que rodea la tecnología— ofrecen una visión de lo que esperamos para el cierre de 2025 y el inicio de 2026: más potencia, más interconexión y más oportunidades para crear, aprender y trabajar con herramientas digitales que están cada vez más cerca de nuestra vida diaria.

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