En un momento en que la inteligencia artificial genera más preguntas que respuestas perfectas, lo que realmente está cambiando el juego es la atención. Un análisis reciente señala que ChatGPT no solo compite en inteligencia, sino que se ha convertido en una máquina de atención global: en septiembre de 2025 sumaba más de 7.000 millones de visitas mensuales en servicios de IA generativa, y ChatGPT acumulaba 5.900 millones, acercándose a gigantes como Instagram. En la economía digital, el recurso más escaso ya no es el dinero, sino el tiempo y la atención de los usuarios. Este cambio de paradigma impulsa una nueva curva de inversión: las empresas apuestan por crecer ahora para monetizar después, incluso si el coste de cómputo es alto hoy.

ChatGPT está entrando de lleno en el terreno de las redes sociales, pero con una dinámica distinta: la interacción es activa, no un feed pasivo. Preguntas, correcciones, nuevas consultas: cada interacción refuerza un hábito y abre la puerta a posibles anuncios en el propio sistema. Aunque los ingresos directos aún no cubren el uso masivo, la promesa de controlar el centro nervioso de Internet explica por qué varios actores continúan invirtiendo miles de millones en IA.

Este contexto convierte a ChatGPT en algo más que una herramienta de respuestas: empieza a funcionar como una infraestructura entre el usuario y la información. Si esa visión se consolida, la monetización podría llegar a través de anuncios y modelos de negocio basados en la atención, con desafíos claros en privacidad, neutralidad y sesgo comercial. En definitiva, la historia no es solo de talento tecnológico; es una historia de dominio de la atención.

Un vistazo al software y al hardware que alimentan esta era

Paralelamente a la conversación sobre IA, las actualizaciones de software y el desarrollo de hardware siguen impulsando la productividad y la innovación. Un ejemplo concreto llega desde el ecosistema de Apple: macOS Tahoe 26.2 introduce mejoras que afectan a millones de usuarios y equipos de trabajo. Entre las novedades destacan: verificación adicional en AirDrop para compartir archivos con contactos desconocidos, enlaces de secciones en Apple News para acceder a temas de interés, y la posibilidad de crear tablas en Freeform que pueden contener texto, imágenes y dibujos, con celdas que se ajustan automáticamente. Además, la playlist Favorite Songs aparece como Top Picks en Apple Music y se corrige un fallo que impedía reproducir álbumes en preventa al salir al mercado.

Estas mejoras no son solo caprichos, sino señales de un enfoque centrado en la experiencia del usuario y en facilitar la colaboración entre apps y creadores. En un entorno tecnológico donde la rapidez de acceso y la conectividad definen la productividad, cada detalle suma para acelerar la adopción y la innovación.

IA para la excelencia en materiales: baterías para climas extremos

La investigación en baterías avanza con una noticia prometedora: investigadores de la Universidad de Chang’an (China) y la Universidad Tecnológica de Queensland (Australia) diseñaron electrolitos de baja temperatura guiados por IA que permiten mantener casi la totalidad de la capacidad tras 300 ciclos a -30 °C, con indicios de alcance de -80 °C. Este logro, impulsado por modelos de aprendizaje automático, propone electrolitos en gel que funcionan en condiciones extremas y podría mejorar significativamente el rendimiento de baterías de iones de litio en entornos fríos.

La implicación es doble: por un lado, coches eléctricos capaces de rendir mejor en climas fríos y misiones extremas; por otro, una demostración de cómo la IA acelera el diseño de materiales y la ingeniería de electrolitos. En un sector donde la autonomía y la seguridad son claves, estos avances abren nuevas rutas para la movilidad y la electrónica avanzada.

Un vistazo al ecosistema y a las alianzas en IA

El ecosistema AI también se ve marcado por vínculos estratégicos entre empresas de contenido y desarrolladores de IA. En una señal de la creciente colaboración entre grandes productoras y plataformas de IA, Disney habría cerrado un acuerdo de licencia con OpenAI, evidenciando una tendencia hacia el uso compartido de capacidades de IA para contenidos y experiencias personalizadas. Este tipo de alianzas sugiere un terreno común en el que la creatividad y la tecnología se retroalimentan para ofrecer nuevas experiencias al público global.

Progreso tangible hacia una energía más limpia con IA

En el plano de la energía de alto impacto, dos proyectos europeos, uno en España y otro en Reino Unido, trabajan para construir plantas piloto de fusión nuclear con miras a generar energía real y neta en los próximos años. Aunque la fusión sigue siendo un desafío, estos avances muestran un camino concreto hacia una fuente de energía limpia, estable y potencialmente abundante que podría transformar la base de la industria tecnológica y su capacidad de innovación a gran escala.

En conjunto, estas noticias dibujan un paisaje tecnológico en plena aceleración: la atención se convierte en un activo estratégico, el software y el hardware se fortalecen para potenciar la productividad, y la investigación en baterías e energía impulsa la promesa de un futuro más eficiente y sostenible. El viaje no está exento de dilemas, pero la dirección es clara: la tecnología ya no es solo innovación aislada, es la intersección entre atención, experiencia de usuario y soluciones concretas para el mundo real.

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